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Conocido ya entre los egipcios, los griegos y los romanos, el hojaldre es una masa cocida al horno muy ligera y crujiente.
La primera versión moderna del hojaldre, tal y como la conocemos hoy, fue inventada a finales del siglo XVIII por el cocinero francés Marie-Antoine Carême, que elaboraba su «pâte feuilletée» con mantequilla en lugar de aceite, y daba instrucciones precisas sobre las distintas seis «vueltas».
Las Millefoglie di Matilde, con sus 192 capas finas y crujientes de hojaldre con mantequilla, son el símbolo de la tradición hojaldrera de Matilde Vicenzi.
Hoy en día, guardamos celosamente esta preparación en el libro de recetas de Matilde. Aún hoy, sus ideas siguen siendo una fuente de inspiración para nuestras dulces creaciones.
La receta tradicional requiere una capa de mantequilla entre dos hojas de masa; luego es necesario doblar muchas veces la masa sobre sí misma, delicadamente.
Nuestro crujiente y fragante hojaldre —el único hojaldre en el mercado compuesto por 192 capas— solo puede realizarse siguiendo este proceso: es este el secreto de las MILLEFOGLIE DI MATILDE.
La dilatada experiencia y la guía de Matilde Vicenzi en la compleja y precisa preparación de la masa han dado vida a una amplia gama de productos de la línea de hojaldres Millefoglie di Matilde.
Nuestra cuidadosa selección de materias primas y nuestra atención particular en las técnicas tradicionales pueden apreciarse inconfundiblemente en el producto final.
Una delicia crujiente al primer bocado, que tienta todo el paladar: la máxima expresión de la pastelería italiana.
Además, el especial envase metálico de color dorado preserva estos delicados pasteles de alta calidad de la exposición a la luz, la cual puede modificar las características organolépticas del producto.
Las Millefoglie di Matilde son perfectas como postre o como merienda por la tarde junto a un té, para compartir con tus seres queridos.
