AUTHOR: Matilde Vicenzi
Los crumbles son ideales para todo tipo de ocasión: un desayuno nutriente, una rápida y sabrosa merienda o un postre ligero para terminar la comida. En primavera, mi combinación favorita es la de fresas frescas de temporada y el inconfundible gusto de mis galletas Amaretti: ¡simplemente deliciosas! Un apetitoso consejo: para un toque irresistible, ¡servir con algunas cucharadas de yogur griego o helado!
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200 g de galletas Amaretti
400 g de fresas
100 g de frambuesas
100 g de harina
125 g de azúcar moreno
75 g de mantequilla
una pizca de sal
zumo de medio limón
Después de haber precalentado el horno a 180 ºC lavar las fresas, quitar las hojas y cortarlas en cubitos; luego lavar las frambuesas.
Disponer la fruta en una fuente de horno, regarla con zumo de limón y espolvorear con 25 g de azúcar moreno.
Desmenuzar las galletas Amaretti y colocarlas en un bol junto con la harina, 100 g de azúcar, la mantequilla y una pizca de sal: remover con las manos hasta obtener una masa firme y troceada.
Recubrir las fresas y frambuesas con el crumble, distribuyéndolo uniformemente sobre toda la fuente.
Cocer en el horno precalentado a 180 ºC durante 20-25 minutos.
Dejar enfriar un poco y servir con unas cucharadas de yogur griego o (para los golosos como yo) una bola de helado.
